Sabemos que es importante que nuestros hijos entiendan que al no seguir las
reglas, siempre habrá consecuencias.
Este concepto me quedó claro y entendí lo siguiente: es importante que concentres en lo que quieres que
tu hijo aprenda de la consecuencia, y no si le va a importar o no.
Te comparto cómo dar consecuencias que funcionan,
incluso cuando los niños dicen que no les importa:
1.
Usa las consecuencias que tienen significado: no es efectivo si le das una consecuencia a tu hijo
en el momento que están hablando sobre lo que hizo y lo que no debió haber
hecho.
Serás demasiado duro o
demasiado indulgente, porque nada apropiado te viene a la mente en ese momento.
Escribe una lista de consecuencias,
ten en cuenta que debe de ser desagradable para que tu hijo se sienta incómodo.
Piensa cual será la lección
que quieres que aprenda. Si tu hijo es grosero con su hermana, quieres que
aprenda a manejar sus emociones y sentimientos. Creo que una consecuencia efectiva
podría ser que perdería el uso del teléfono celular hasta que no maldiga y no
sea grosero con su hermana durante 24 horas.
2.
No intentes apelar a sus emociones con discursos: tu trabajo no es hacer que tu hijo ame a su hermana
o apelar a sus emociones con un discurso porque todo lo que oirá es: "tu hermana
te admira, bla, bla, bla".
Tu trabajo es decirle a tu hijo: te devolveremos el celular, cuando veamos un cambio
en tu trato con tu hermana.
3.
Las consecuencias deben ser claras: cuando das una consecuencia, entre más clara sea,
mejor. No des mucha explicación o un largo discurso, porque pierde la
efectividad. Debes explicar claramente
que la consecuencia fue por su comportamiento inapropiado con su hermana.
Puedes decirle:
"Si sigues hablando mal con tu
hermana, esto es lo que va pasar de ahora en adelante".
4.
Tener conversaciones para resolver problemas: después que haya pasado el incidente, es vital e
importante tener una conversación con tu hijo para aclarar, y para evitar que
siga ocurriendo lo que hizo.
Cuando las cosas están bien, puedes decirle: si te frustras con tu hermana en el futuro, ¿qué puedes hacer diferente, aparte de insultarla?
¿Quieres a tu hermana? ¿Tu hermana te trata mal? Hagamos una
lista de cosas que puedes hacer.
Conversaciones como estas
son la forma que puedes hacer que tu hijo piense en soluciones alternativas en
vez de que le grite a su hermana.
5.
No te involucres por un argumento sobre las
consecuencias: si empiezas a discutir
con tu hijo sobre la consecuencia, no tienes nada por ganar. Tu hijo quiere
mostrarte que no le duele la consecuencia que le has dado.
Si tu hijo te dice algo que te duela, dile “NO es aceptable que me
hables así” te volteas y sales del
espacio donde están hablando. No te enganches y alegues con él, porque no vas a
ganar nada.
6. No castigues a tus hijos
quitándole cosas por un tiempo determinado:
¿has castigado a tus hijos quitándole el celular por 7 días, o no que no puedan
ir con sus amigos? Personalmente, creo que es un error.
Es un error porque tu hijo no
aprenderá nada, solo matar el tiempo hasta que pase el castigo. Pero si lo
derribas hasta que logre ciertas cosas, puedes aumentar considerablemente la
efectividad de la consecuencia.
Tus consecuencias deben
estar orientadas a la tarea, no orientadas hacia el tiempo. Si tu hijo pierde
sus privilegios de video juegos durante 24 horas, debería estar haciendo algo
dentro de ese marco de tiempo que lo ayude a mejorar su comportamiento.
Debe aprender a pensar cómo comportarse de manera más apropiada.
Queremos que las consecuencias
sean experiencias de aprendizaje. Y un mejor
comportamiento ES la meta.
7.
Involucrar el interés propio de tu hijo: inicia a hacerle preguntas que atraigan el interés
personal de tu hijo, por ejemplo, podrías preguntarle:
¿Para no meterte en problemas, qué vas a hacer
la próxima vez cuando pienses que papá está siendo injusto?"
Los adolescentes están muy
alejados de los sentimientos de los demás, particularmente de sus padres. Así
que aprende a apelar a su propio interés y pregúntale lo siguiente:
¿Qué puedes hacer para no tener problemas la
próxima vez? Entiende, si vas a hablar
mal a tu hermana, las cosas solo van a empeorar para ti, no para mejorar.
8. Cómo saber si una
consecuencia está funcionando: Te ha pasado que tu hijo actúa
como si no le importara. Entonces, ¿cómo
puedes saber si la consecuencia que le estas dando está funcionando?
Es simple:
sabrás si está funcionando mientras te le exijas responsabilidad. La
responsabilidad brinda la
mejor oportunidad de cambio.
Piensa en el oficial de
policía que le da la multa por exceso de velocidad a un conductor. ¿Crees
realmente que una única multa por velocidad asegura que un conductor nunca
vuelva a acelerar? Por supuesto no.
9.
Algunas cosas nunca deben ser usadas como
consecuencias: en mi opinión, hay
ciertas cosas que nunca se le deben negar a los niños. Por ejemplo, nunca debe
prohibir que tu hijo vaya a la fiesta de graduación, Jamás. Eso es algo
importante en la vida de tu hijo.
Tu hijo no va a aprender
nada de esa experiencia. Solo va a estar amargado. Lo
que yo hice con mis hijos,
fue preguntarles, ¿Qué pasa si no hacen
su parte
(responsabilidades)?
Recuerden la regla, “si ustedes
hacen su parte, yo haré mi parte”
10. No muestres disgusto: cuando le des una
consecuencia a tu hijo, se constante y firme, pero no muestres disgusto.
En mi opinión, nunca debes
ser sarcástico con su hijo porque lo estás hiriendo. Lo que estás tratando de
hacer es criar a alguien que pueda funcionar, no a alguien que siente que son
una decepción constante para ti.
Recuerda, la expresión de
tu cara y el tono de tu voz, le comunican mucho más a tu hijo que tus palabras.
El respeto positivo es fundamental para
transmitir tu mensaje.
No es fácil aplicar consejos, pero si no lo intenta ponerlo en práctica, guiar tus
hijos seguirá siendo todavía más difícil a través del tiempo.
Ve al siguiente link:
Déjanos un comentario si es que te ayudan los consejos.
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